martes, 25 de octubre de 2011

Entrevista ::Ciencia y Negocios:: Dr. John Délano F.

Entrevista con el Dr. John Délano del departamento de Biotecnología en el CINVESTAV unidad Irapuato

¿Por qué surge la idea de investigar precisamente la tolerancia del amaranto a condiciones adversas?

Re: Existen numerosos datos experimentales que han demostrado, tanto en condiciones controladas como de campo, que el amaranto tolera condiciones de estrés abiótico, como aridez, salinidad y luminosidad excesiva, por encima de límites que son letales para la mayoría de los cultivos comerciales, particularmente cereales. Todo indica que lo anterior está relacionado con una alta eficiencia del uso del agua y a un tipo de fotosíntesis que permite absorber altos niveles energía luminosa sin generar especies químicas tóxicas para la planta. Esto lo hemos confirmado en nuestro laboratorio mediante cuidadosas mediciones del grado de salinidad o deshidratación que pueden soportar, el cual se acerca al de plantas que habitan hábitats extremos como manglares y desiertos. Su capacidad de resistencia/tolerancia a estrés biótico no está tan bien estudiada, pero al parecer el amaranto también es sobresaliente en este aspecto. Un ejemplo claro es su inusitada capacidad de recuperarse de defoliación completa (lo que ocurre en casos de infestación severa por ciertas plagas o por causa de granizo extremo u otros tipos de daño grave) a tal grado que, dependiendo de la temporalidad del daño, la productividad no se ve afectada. Esto es un aspecto que estamos estudiando actualmente y parece estar relacionado con la gran capacidad del amaranto de movilizar sus reservas de carbohidratos a tejidos menos vulnerables para usarlos después durante el proceso de recuperación.

¿Qué otras plantas cuentan con esta característica?

Re: El amaranto pertenece a un orden (Caryophyllales) y familia (Amaranthaceae) de plantas que se caracteriza por tener varias especies altamente resistentes a la salinidad (e.g. especies halófitas) y la sequía. Muchas de ellas, que viven en hábitats extremos (de allí su clasificación como extremófilas), se han adoptado como modelo de estudio en varios laboratorios, particularmente en China, para entender mejor los mecanismos mediante los cuales las plantas pueden tolerar condiciones ambientales que son letales para la mayoría de las especies vegetales.

¿Qué otros proyectos de investigación está llevando a cabo ahora?

Re: Gradualmente, nuestro grupo de investigación se ha ido concentrando en el estudio del amaranto, aunque seguimos manteniendo otros modelos de estudio, como jitomate, tabaco y Arabidopsis, para estudiar diversos aspectos de resistencia a estrés (a)biótico en plantas. También nos interesa entender la influencia de las interacciones benéficas que las plantas pueden establecer con ciertos microorganismos, como hongos micorrícicos y bacterias promotoras del crecimiento, en la resistencia a condiciones adversas del ambiente. Otro aspecto interesante que seguimos estudiando es la posibilidad de comunicación entre plantas, o entre plantas y microorganismos, mediada por compuestos volátiles. Asimismo, colaboramos en el estudio de respuestas de resistencia a estrés biótico en otra especie muy importante para México pero igualmente poco estudiada, como es el tomate de cáscara o tomatillo.

¿Cuál cree que sea la aportación de sus investigaciones al sector económico o a las empresas de nuestro país?

Re: Creo que la aportación tiene el potencial de ser muy importante. El amaranto sigue siendo un cultivo menor debido a las dificultades que todavía representa su cultivo a gran escala. Aunque yo no soy un experto en mejoramiento genético, es posible que algunos de los mecanismos que estudiamos y/o genes que hemos ido descubriendo en investigaciones adicionales, como la secuenciación masiva del transcriptoma de amaranto de grano recientemente publicada, podrían ayudar a resolver algunas de estas dificultades. Pero debo enfatizar que toda esta aportación se produciría a mediano o largo plazo.

¿Cómo piensa que se puede construir un sector agrícola más fuerte?

Re: Te voy a dar una opinión muy personal, derivada de mi breve y limitada experiencia en el campo. Durante el proyecto financiado por la UE, tuve que realizar tres experimentos de campo (entre los años 2007 y 2009) para estudiar diversos aspectos agronómicos de 24 genotipos de amaranto de grano que se eligieron para ello. Como esto involucraba insertar el cultivo del amaranto dentro de un ciclo agrícola típico de la zona del Bajío guanajuatense, su cultivo se alternó con el trigo (de riego, en el ciclo de invierno) y el maíz (de temporal, en el ciclo primavera-verano). De modo que renté un pedazo de tierra y contraté trabajadores de campo y me puse a trabajar. Y en esta breve experiencia noté muchas cosas que están afectando al sector agrícola, al menos desde el punto de vista de los pequeños productores: 1) falta total de asesoría; debido a ello, los campesinos siguen usando prácticas ineficientes o hasta dañinas para el medio ambiente. No se explora el uso de control biológico, ni de alternativas que reduzcan el uso indiscriminado de fertilizantes, que paradójicamente van reduciendo gradualmente la fertilidad del suelo, que cada vez produce menos, ni de técnicas de riego que permitan el ahorro de agua, que cada vez se obtiene de depósitos más profundos que, quizás, puedan tener niveles altos de metales pesados (como la sospecha de altos niveles de arsénico en el agua que empleaba para el riego de trigo, que nunca comprobé), ni de experimentar con otros cultivos alternativos, quizás más rentables, y 2) la falta de organización y la pérdida gradual del concepto de comunidad; debido a ello, cada productor es un individuo que año con año tiene que enfrentarse a solas con los grandes, pequeños y medianos compradores de granos, ya sea de trigo o maíz, que establecen el precio por tonelada, por un mecanismo que nunca llegué a comprender totalmente, el cual comprobé personalmente que dejaba un margen de ganancia mínimo o nulo. Así desaparece toda posibilidad de ir acumulando un capital, aunque sea modesto para progresar y poder pensar en una agricultura más eficiente. Además, como la comunidad ha ido desapareciendo como producto de la migración o del desinterés por la tierra (cuyos frutos no justifican el esfuerzo requerido para levantar una cosecha), al menos donde estuve, no percibí esfuerzos conjuntos para organizarse y presentar un frente común para exigir mejores precios a sus cosechas (siempre pensé en una cooperativa donde los productores pudieran almacenar sus granos y esperar, sin tener que venderlos a como diera lugar, por temor a perderlo todo o por la premura de iniciar el próximo ciclo) y para buscar formas de mejorar su situación actual. Creo que estos son aspectos graves que deben corregirse pronto para tener un sector agrícola más fuerte y progresivo.

¿Qué consejo daría usted para que se apoyara más a la ciencia en México?

Re: La respuesta es simple: tanto el gobierno como el sector privado deben convencerse de que es rentable invertir en investigación, aun cuando sea básica y/o sus posibles beneficios se obtengan a un largo plazo. Con apoyos más sólidos, se podría pensar en proyectos más ambiciosos, y por ende, de mucho más alcance y con perspectivas de logros más relevantes.

¿Qué relación ve usted entre ciencia y negocios?

Re: Que debe existir, siempre y cuando el conocimiento generado sea para el beneficio de la humanidad y del planeta, y no de unos cuantos.


Escuchen próximamente la entrevista que se realizará por su programa de Ciencia y Negocios 660AM

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
Design by Free WordPress Themes | Bloggerized by Lasantha - Premium Blogger Themes | JCPenney Coupons